Tensión creciente en el PJ bonaerense por la demora en las negociaciones de unidad entre Kicillof y La Cámpora
Por Redacción del Diario INFOPBA
Un clima enrarecido atraviesa al peronismo bonaerense por la prolongada demora en las negociaciones que deberían consolidar la unidad entre las principales fuerzas que integran el espacio. La falta de acuerdos y la ausencia de encuentros concretos entre el Movimiento Derecho al Futuro (MDF), el cristinismo y el Frente Renovador aumentan la incertidumbre a días del cierre de listas.
Este viernes, a las 12 horas, se llevará a cabo una reunión en la sede nacional del Partido Justicialista, convocada por el kirchnerismo, en la que participarán presidentes y apoderados de los partidos que conforman Unión por la Patria (UP). Sin embargo, la agenda formal de ese encuentro, que apuntará principalmente a cuestiones legales y administrativas, no despeja las dudas sobre la unidad política y electoral.
Desde distintos sectores reconocen la dificultad para coordinar y comunicar una estrategia común. Un funcionario camporista admitió: “Hay un vacío de información y una falta total de coordinación”. Por su parte, referentes del MDF analizan la posibilidad de presentar un frente propio ante la falta de definiciones claras, un gesto que podría ser interpretado como una señal de ruptura.
La tensión también se refleja en la relación entre el gobernador Axel Kicillof y La Cámpora. Mientras el mandatario bonaerense insiste en acelerar las conversaciones para definir las listas, en su entorno piden que tome el liderazgo de la negociación y marque condiciones para evitar divisiones internas que podrían afectar el desempeño electoral.
El próximo lunes 9 de julio vence el plazo para inscribir las alianzas electorales, lo que pone un límite de tiempo a las negociaciones. La complejidad del escenario aumenta si se considera que, en caso de ruptura, será muy difícil armar listas competitivas en los principales distritos del conurbano, donde cada sector domina territorios electorales distintos.
En definitiva, el peronismo bonaerense transita un momento delicado. La unidad que se logró en 2019 para enfrentar a Mauricio Macri parece haberse diluido, y el desgaste político junto con las diferencias internas ponen en jaque la estrategia electoral. La reunión del viernes será la primera instancia formal para ordenar las piezas, pero el desafío real seguirá siendo construir un acuerdo político que deje atrás la desconfianza y los roces.
Opinión pública: Analistas consultados coinciden en que la falta de consenso dentro del peronismo bonaerense podría beneficiar a las fuerzas opositoras en las próximas elecciones. La imagen de un espacio fragmentado y sin liderazgo claro refuerza la necesidad de un acuerdo rápido y efectivo para evitar perder terreno en distritos claves del país.