Vecinos de La Matanza y el conurbano bonaerense reclaman por las inundaciones tras la tormenta de Santa Rosa
Las intensas lluvias provocaron calles anegadas y viviendas afectadas en distintos puntos de la provincia de Buenos Aires. En Villa Celina, los vecinos denunciaron que el agua ingresó en sus hogares y criticaron la falta de obras de desagüe.
La tormenta de Santa Rosa volvió a golpear a la provincia de Buenos Aires y dejó como saldo serias inundaciones en varias localidades del conurbano. Uno de los puntos más afectados fue Villa Celina, en el partido de La Matanza, donde los vecinos aseguraron que, por segunda vez en diez días, el agua avanzó sobre las calles y entró en las casas.
Las imágenes difundidas muestran avenidas y pasajes completamente cubiertos por el agua, lo que obligó a automovilistas y peatones a buscar alternativas para desplazarse. Algunos vehículos quedaron varados y quienes dependen del transporte público debieron esperar el colectivo en medio del agua acumulada.
“Se me apagó la camioneta por el agua. No hay una señal que marque el desvío. Tengo mercadería y la van a tener que tirar”, relató un comerciante de la zona, visiblemente afectado por la situación. Otro vecino remarcó: “Está todo inundado, más atrás también hay mucha agua, se tapó completamente”.
Los testimonios coinciden en que el problema se repite cada vez que las lluvias son intensas. “Tuve que caminar seis cuadras para ir a trabajar. Rebalsan las cloacas y hay que esquivar todo. Ya sé que cuando llueve tengo que salir mucho antes para evitar esto”, explicó una joven que aguardaba el colectivo en medio del anegamiento.
Otros señalaron directamente el ingreso del agua en sus casas: “El desagüe está tapado y la municipalidad hace cosas, pero hay algo que no va. El agua se mete en la casa y no sabemos cómo frenarla”.
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) emitió una alerta amarilla por tormentas para siete provincias, incluida Buenos Aires, lo que anticipa la continuidad de las lluvias durante este lunes. Según el organismo, este nivel de alerta implica “posibles fenómenos meteorológicos con capacidad de daño y riesgo de interrupción momentánea de actividades cotidianas”.
La preocupación de los vecinos no es solo coyuntural. En Villa Celina y otras zonas del conurbano, los anegamientos se han vuelto una constante que genera pérdidas económicas, complicaciones para trasladarse y el temor permanente de que el agua ingrese en las viviendas. Desde distintos sectores reclaman obras de infraestructura hídrica más profundas que eviten que cada tormenta derive en una emergencia barrial.
La cobertura completa de esta situación se encuentra en INFOPBA, donde los vecinos hicieron llegar sus testimonios y reclamos.
