Kicillof encara una jornada clave: avanza el dictamen y queda a un paso del endeudamiento que define su gestión

Redacción del Diario INFOPBA — La Legislatura bonaerense se prepara para una de las jornadas más decisivas del año. Tras un extenso debate, la comisión de Presupuesto e Impuestos de la Cámara de Diputados emitió dictamen favorable al proyecto de financiamiento impulsado por el gobernador Axel Kicillof, dejando el paquete completo de leyes —Presupuesto 2026, Impositiva y Endeudamiento— listo para llegar al recinto este miércoles.

Desde las 14, Diputados abrirá una sesión que promete ser maratónica, mientras que el Senado fue convocado a las 19. El objetivo del Ejecutivo es claro: obtener por primera vez en dos años un Presupuesto aprobado y, sobre todo, conseguir la autorización para tomar deuda, la pieza más compleja del tablero político.

El dictamen en comisión avanzó con los votos del oficialismo y el acompañamiento del diputado dialoguista Gustavo Cuervo. El resto de los bloques opositores —PRO, UCR, Coalición Cívica, Somos, Unión y Libertad— votaron en contra, aunque sin presentar despacho propio, un gesto que dejó abierta la negociación para el recinto.

Por pedido de intendentes de distintos espacios y tras conversaciones directas con el gobernador, se incorporaron dos modificaciones al proyecto: la unificación de los fondos previstos para los municipios, que elevaron a USD 3.035 millones el monto total del Fondo de Emergencia y Fortalecimiento de Inversión Municipal, y la condonación de las deudas generadas durante la pandemia por el Fondo Covid-19.

La distribución del dinero para los municipios —que recibirán el 8%, unos $365.000 millones al tipo de cambio actual— se convirtió en una de las claves para destrabar votos opositores, en un escenario donde los jefes comunales advierten por la falta de recursos para afrontar diciembre y el pago de aguinaldos.

El poroteo y el desafío numérico

El oficialismo necesita alcanzar los dos tercios para habilitar el endeudamiento. En Diputados, Unión por la Patria controla 37 bancas sobre 92, por lo que requiere de al menos 24 apoyos no peronistas si la sesión se realiza con el recinto completo.

El mapa opositor está fragmentado: PRO (13), La Libertad Avanza (12), UCR + Cambio Federal (9), Somos y Unión y Libertad (6 cada uno), Nuevos Aires y Coalición Cívica (3 cada uno), además del FIT y Derecha Popular. Sin votos del PRO o de LLA, el número no cierra. En la Cámara Alta, el esquema se repite: aunque UP podría sumar voluntades, sigue quedando a cuatro senadores del objetivo.

Fuentes legislativas señalaron a INFOPBA que la estrategia cambió este año: sólo llegan a recinto los proyectos que tienen chances reales de aprobación. La señal, interpretan en ambos lados, marca que el oficialismo cree que todavía puede reunir los votos necesarios.

Negociaciones, tensiones y 24 horas de definiciones

En torno a las conversaciones, operadores del Ejecutivo —Gabriel Katopodis, Mariano Cascallares, Facundo Tignanelli, Rubén Eslaiman y Alexis Guerrera— mantienen reuniones con bloques opositores. La oferta de sillas en el directorio del Banco Provincia, además de un fondo para los municipios, aparece como parte del menú de negociación.

Aun así, la oposición más dura insiste en que “el acuerdo global está lejos”. Además, dentro del propio oficialismo persisten tensiones con sectores alineados a La Cámpora, que también deben unificar posición para llegar a la votación con un bloque ordenado.

En paralelo, los intendentes —de todos los espacios— sostienen la presión para obtener asistencia inmediata. Varias comunas advierten que sin aportes extraordinarios no podrán pagar los compromisos de fin de año. El pedido abarca fondos de libre disponibilidad y la cancelación de deudas con IOMA e IPS.

Un punto de inflexión político

Con el reparto de cargos en organismos clave fuera de discusión, y el Senado evaluando incluso postergar una semana su sesión, la pulseada por el endeudamiento se convirtió en la prueba política más compleja para Kicillof desde el inicio de su segundo mandato.

Este miércoles, la Legislatura definirá si el gobernador logra finalmente avanzar con su plan financiero o si la falta de consenso fuerza a reconfigurar toda la estrategia económica de la Provincia.

Opinión pública razonada

El clima que se respira en La Plata anticipa un cierre de año decisivo. Si la sesión se desarrolla como espera el Ejecutivo, Kicillof podría obtener un alivio político y financiero clave en un contexto económico adverso. Si la negociación fracasa, el mensaje será contundente: la Legislatura marcará límites más firmes al oficialismo y quedará expuesto un escenario de mayor fragmentación en la política bonaerense. En cualquier caso, la votación reflejará la nueva correlación de fuerzas que cruza a la Provincia.