Un invento mexicano convierte el agua en polvo y podría ser la solución global contra la sequía
Por Redacción Grupo de Medios infopba.com
La lucha contra la escasez hídrica tiene un nuevo aliado inesperado: el "agua sólida", un desarrollo tecnológico que transforma el modo en que el agua se almacena y distribuye en la agricultura. Esta innovación, creada por el ingeniero mexicano Sergio Jesús Rico Velasco, egresado del Instituto Politécnico Nacional (IPN), podría marcar un antes y un después en la producción de alimentos en todo el mundo.
El invento, conocido popularmente como "agua en polvo", se basa en un polímero biodegradable con la capacidad de absorber hasta 200 veces su peso en agua. Una vez hidratado, se convierte en un gel que mantiene la humedad del suelo durante más de 30 días, incluso en condiciones extremas de sequía.
Su eficacia ha sido comprobada en diversos países —México, India, Ecuador, España, entre otros— donde su implementación permitió reducir entre un 50% y un 90% el consumo de agua destinado al riego. Además de su impacto ambiental, el beneficio económico es inmediato: menores costos operativos y mayor estabilidad en las cosechas.
“Una sola aplicación puede durar semanas, lo que representa un cambio radical en las zonas donde el acceso al agua es limitado o costoso”, explicaron desde el entorno del inventor.
La sencillez del método es otro de sus puntos fuertes. El polvo se mezcla con el agua y se aplica directamente al suelo, donde se activa y comienza a liberar el líquido de forma lenta y continua. No requiere maquinaria especializada ni mantenimiento adicional, lo que facilita su adopción incluso en comunidades rurales.
Desde Grupo de Medios INFOPBA celebramos este tipo de avances tecnológicos, especialmente cuando nacen en Latinoamérica, una región históricamente golpeada por la escasez hídrica y la falta de innovación accesible al pequeño productor.
Este tipo de soluciones podrían ser clave para la soberanía alimentaria en un contexto de cambio climático y crisis del agua.
Opinión pública: especialistas en desarrollo sustentable consultados por INFOPBA sostienen que esta invención debería ser declarada de interés mundial por organismos como la FAO y la ONU, y aplicada de manera masiva en zonas vulnerables como el norte argentino o el cinturón agrícola africano.